miércoles, 5 de noviembre de 2008

La trágica vida de Inocencia Cadalso ( una mujer con olor a bencina)

Ese hombrecito enjuto y pálido había decidído buscar el calor que no recibía de su propio organismo,en la ferocidad caliente de una mujer como Porota...una mujer que enseñaba los dientes como un perro y que repartía órdenes como un sargento de caballería. ¿qué extraña pasividad se enroscaba como una culebra dentro de Pasalaccua, para empujarlo a esa unión destemplada y violenta..?
La prima Porota jamás había demostrado ningun interés por nada ni nadie que no fuera ella misma, si hasta cuándo decidió seguir la carrera de medicina,y se lo comunicó, solemnemente a Piruca, nadié le creyó, supongo que hasta a ella misma, el anuncio de su "repentíno amor"por el prójimo, la dejaba con sensaciones extrañas e incómodas...como ponerse una bombacha mojada y sentarse en un sillón de terciopelo...
Tampoco le conocímos novios, ni amigos, ni simpatías, ni siquiera enemigos...Porota era inpermeable a todo contácto social, a cualquier cercanía aféctiva, incapaz de establecer siquiera una relación distante con ningún semejante,imaginamos que quedaría en la vida para "Vestir santos", es decír, que se convertiría en una solterona insoportable y odiosa...sin embargo, quiso el destino taparnos la boca con la mejor de las jugadas: Casar a Porota.
Convertirla en la" Señora de Pasalaccua", en la mujer del Doctor y, a ella misma, en una hembra que nadie hubiera imaginado en una cama y con un hombre...aunque ese hombre, fuera el mismísimo Pasalaccua, una marioneta de barro en las manos de una titiritera caprichosa y feróz...

2 comentarios:

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.