"La Tragica vida de Inocencia Cadalso" (Una mujer con olor a bencina)

Finalmente...
la vieja hablo'.
Y lo que dijo, nos dejo a todos sin palabras...
la abuela, como una esponja, chupo'todo el vocabulario familiar, las pequeñas mayusculas, las exclamaciones,las boludeces semanticas,el repetitivo diccionario de barrio que se cocinaba dentro de nuestros corazones, como un pan de campo.
Y asi, enfrentada a la tia piruca,abrio su boca finita como una cinta, y de sus labios de vieja,salieron palabras tan horribles, pero tan horribles que hasta el "accidente" Navideño parecio' un cuento de niños, o una revista de "Pepin Cascaron..."..." Soy Teresiiii...iiiiiiTAAAA,
Teresita!!!...( decia)volvi para contarles... para contarleeeees.!!!..insistia, grave, en una voz de humo, de niebla, de baba de caracol, caminando en redondo por las paredes del living-comedor, serpenteando por las baldosas del patio, una voz reseca como un atun espolvoreado en sal gruesa, y al sol, filtrandose entre las juntas de alquitran de la terraza...una voz muerta y añejada como un vino que nadie se atreveria a tomar... la voz de teresita, La "señora" de Roque , que salia como el agua de una canilla rota del garguero de la abuela, con la impunidad de una promesa amorosa...
¿Era realmente la voz de la difunta lo que Tia Piruca y yo escuchabamos con espanto, mientras nos persignabamos compulsivamente,y temblabamos como la cola de un barrilete enredado en los cables del telefono...?
O era la abuela, que en trance, nos dirigia ese discurso personalizado y demente, en lo que creiamos, era el final , de una vez y para siempre, del trajinar en esta tierra, de una vieja que nos cantaba como un cardenal, sus ultimos dias...intoxicados por espiritus navideños y borlas fantasmales...?
En ese desgraciado momento ,no estabamos la tia y yo, para sacarle punta al lapiz , ni siquiera, para guardar el secante en una cartuchera... La bandera de ese presente, nos envolvia con la misma solemnidad de un procer,en una escuela, donde la "Pluma" y la "Palabra" estaban lejos, tan lejos como una realidad, que de golpe, nos atormentaba con la seriedad de un aplazo...

Continuara'!